Investigación documental, cualitativa o cuantitativa: ¿cómo encontrar las respuestas que su empresa necesita?

29 de octubre de 2021 | Analítica, Blog

Todo proyecto de investigación parte del mismo punto de partida: una pregunta que necesita respuesta. ¿Están mis clientes satisfechos? ¿Qué se puede mejorar en productos y servicios? ¿Cuál es la reputación de mi empresa? ¿Cuáles son las principales tendencias del sector? ¿Qué innovaciones del mercado debo seguir? ¿Cuál es la tendencia de los formadores de opinión en el debate sobre esa medida regulatoria? ¿Debería explorar un nuevo nicho de mercado?

Saber con precisión qué tipo de datos estratégicos necesita recopilar la empresa para respaldar su comunicación, marketing y planificación empresarial es fundamental para definir la mejor metodología. Es lo que garantizará que la encuesta sea realmente útil, aportando información relevante y compensando (a menudo superando) el retorno de la inversión. Entre las técnicas utilizadas se encuentran la investigación documental, investigación cualitativa y investigación cuantitativa, todo ello actualmente apoyado en tecnologías avanzadas, como la Inteligencia Artificial.

También conocida como investigación secundaria, la investigación documental es un proceso sistematizado de investigación, recopilación y análisis de información ya disponible sobre ese tema o sector –de ahí el uso del término secundario. Podrá incluir el acceso a bases de datos públicas o firmadas, internas o externas, informes sectoriales publicados por entidades o autoridades, estudios previos ya realizados, artículos publicados en prensa, publicaciones y posts académicos y conversaciones en las redes sociales, entre otras fuentes. Se recomienda cuando el objetivo es generar un escenario inicial, sustentado en el conocimiento existente. En tiempos de competencia feroz y cambios tan dinámicos, sería la “tarea” básica de toda buena planificación estratégica.

La investigación cualitativa es un método de investigación exploratorio, recomendado cuando se necesita identificar las motivaciones, opiniones y percepciones del público objetivo de su empresa, el partes interesadas, sobre un tema determinado. No se pretende generar análisis numéricos o estadísticos, sino responder específicamente a cómo y por qué se manifiestan esas tendencias, experiencias, puntos de vista, conceptos y creencias. Utiliza preguntas abiertas y generalmente implica entrevistas individuales en profundidad o grupos de enfoque, donde un número limitado de personas debaten e interactúan sobre el tema.

La investigación cuantitativa responde a la demanda de datos numéricos, basados en modelos y muestras validados estadísticamente, para comprender el predominio de determinados comportamientos, opiniones, dificultades y perfiles de los clientes y otros stakeholders. Si bien la investigación cualitativa tiene como objetivo responder cómo y por qué ocurre esa tendencia, aquí la pregunta es en qué medida ocurre esa tendencia. La primera medida es calcular la muestra estadísticamente válida: podrían ser 10, 100, 1000 encuestados o más. Lo que influye en esta cantidad es el universo total de esta audiencia y algunas de sus características. En este caso se aplica un cuestionario estructurado con preguntas cerradas, generalmente de forma presencial, telefónica o cumplimentando un formulario online. Los resultados permiten el análisis numérico, mediante gráficos e indicadores.

Todos juntos si, pero no mezclados

No hay un proyecto de investigación igual a otro. Cada encuesta debe ser estructurada por el profesional del análisis estratégico según el objetivo de la empresa, con las técnicas más adecuadas, incluyendo variables como los fondos disponibles y el plazo requerido. En muchos casos, estas tres metodologías se utilizan juntas, como parte de un proceso de investigación más elaborado, donde un paso complementa al otro. Este es el caso, por ejemplo, del lanzamiento de un nuevo producto o servicio, cuando la empresa necesita trabajar con objetivos a largo plazo, hay una alta inversión en juego y, por supuesto, una alta expectativa de retorno.

En una etapa temprana, la investigación documental puede ayudarle a comprender todo sobre el mercado actual, quiénes son los competidores que ya están presentes, qué productos o servicios similares existen ya, las ventajas competitivas que puede tener, quiénes son sus clientes potenciales, qué ya tiene. hacer en materia de marketing y comunicación, posibles retos inherentes al sector y quiénes son los líderes de opinión relevantes.

Con este primer escenario entre manos, entra en juego la investigación cualitativa con estos líderes de opinión y clientes potenciales, buscando comprender qué impulsa la elección y la demanda de este tipo de producto o servicio, las posibles percepciones e incluso conceptos erróneos que pueden afectar su consumo. Armada con estos conocimientos, la investigación cuantitativa puede validar el grado en que estos comportamientos y creencias predominan entre su público objetivo. El informe final de toda esta encuesta aporta valiosas conclusiones e indicadores, que podrían marcar la diferencia entre el éxito o el fracaso de su lanzamiento.

¿Es demasiado caro investigar? ¡Noticias falsas!

Por su versatilidad, las metodologías de investigación y análisis de datos pueden ser adecuadas para todos los tamaños de empresa, todos los objetivos y, muy importante, todos los presupuestos. La principal ventaja competitiva hoy en día de una empresa especializada en análisis estratégico –quizás de todas las empresas– es precisamente la capacidad, el conocimiento y la experiencia para recomendar con confianza la mejor estrategia personalizada para cada cliente y sus demandas. Esto incluye flexibilidad, personalización, apertura a la negociación y una visión a largo plazo para fomentar asociaciones duraderas y productivas.

Si cree que este es un recurso inaccesible para su empresa, piénselo de nuevo. Quizás todavía no he encontrado el indicado. socio adecuado y competente para esta tarea.

 

¿Te gustó este contenido? Compartir

Confira outros posts